ESTADOS UNIDOS.- La economía de Estados Unidos se desacelera a un mayor ritmo del que se temía debido a la alta inflación y es probable que sufra una recesión a finales de este año, advirtió Bank of America.
Esta es la primera vez que Bank of America pronostica abiertamente una recesión desde que estalló la pandemia a principios de 2020. Un creciente número de grandes bancos ha anticipado una recesión este año o el próximo, aunque otros argumentan que la economía de EE.UU. todavía puede evitarla.
“El impulso en la economía nacional claramente parece estar desacelerándose. El impuesto de inflación elimina la capacidad de los hogares de gastar en artículos discrecionales a un ritmo acelerado”, dijo Michael Gapen, economista de Bank of America, en una entrevista telefónica con CNN.
Bank of America dice que hay “tendencias preocupantes”
Bank of America hizo su advertencia de recesión antes del informe de inflación de junio, que se publicó este miércoles y cuya cifra resultó peor de lo esperado. Gapen comentó que el índice de precios al consumidor, que registró su mayor aumento desde noviembre de 1981, le da un “poco más” de confianza en que habrá una recesión porque muestra cuán amplio es el problema de la inflación.
“No se puede decir que esto es solo un tema de energía”, añadió.
Bank of America citó tendencias “preocupantes” de los gastos en servicios, incluidos los propios datos de tarjetas de crédito y débito del banco, que apuntan a una mayor debilidad de la prevista.
La buena noticia es que Bank of America prevé una recesión “suave”, no un colapso más drástico como la Gran Recesión que comenzó a fines de 2007.
La expectativa es que el PIB real disminuya un 1,4% este año, antes de recuperarse un 1% el próximo año, dijo Bank of America.
¿Qué puede pasar con el desempleo?
Se espera que la tasa de desempleo se dispare del nivel históricamente bajo del 3,6% en este momento al 4,6%. Sin embargo, esa cifra estaría muy por debajo del pico de abril de 2020, que fue casi el 15%.
Para fines del próximo año, Bank of America anticipa que la Reserva Federal cambie de rumbo y comience a reducir las tasas de interés, luego de una serie de aumentos agresivos destinados a controlar la inflación.
Otros economistas son más optimistas.
Goldman Sachs dijo esta semana que el riesgo de una recesión durante el próximo año es de solo el 30%, aunque aumenta a casi 50/50 en los próximos dos años. El banco de Wall Street indicó que, pese a los temores del mercado sobre una recesión inminente, “tenemos dudas de que la economía ya esté en recesión”.
Bank of America sostuvo que la alternativa más probable a su advertencia de es que la economía estadounidense evite una desaceleración a corto plazo y requiera una segunda ronda de aumentos de tasas de interés por parte de la Reserva Federal a fines de 2023 o 2024.
“Sospechamos que la Fed probablemente tendría que volver a ingresar a los mercados con una segunda ronda de ajuste una vez que quede claro que la economía continuaba excediendo su potencial a largo plazo”, destacó Bank of America.