El gobierno del presidente Joe Biden anunció este viernes dos acciones que apoyarán los servicios de salud mental en las escuelas, tanto con una inyección de $300 millones al presupuesto que les asignan como con acciones que impulsen a los gobiernos estatales a sumarse.
El anuncio contempla información sobre cómo las agencias están ejecutando y cumpliendo la promesa del presidente Biden de hacer que los apoyos de salud mental sean más accesibles, además del inicio de acciones enfocadas en la salud mental de los jóvenes.
Primero, el plan otorgará casi $300 millones de un presupuesto asegurado a través de un acuerdo general bipartidista correspondiente al año fiscal 2022 y a la Ley de Comunidades más Seguras que busca expandir los servicios de salud en las escuelas.
Además, los secretarios Xavier Becerra, de Salud, y Miguel Cardona, de Educación, se comunicarán con los gobernadores para destacar cómo pueden invertir más en servicios de salud mental en las escuelas y detallando los recursos federales disponibles para apoyar.
“Sabemos que las vidas, el aprendizaje y las relaciones de nuestros jóvenes se han visto interrumpidos de manera sin precedentes por esta pandemia. Y eso ha contribuido a las brechas de aprendizaje, académicas y de salud mental que se han ampliado para muchos jóvenes”, dijo un alto funcionario con conocimiento del tema.
“Está claro que nos enfrentamos a una crisis de salud mental juvenil en comunidades de todo el país. Los informes de jóvenes sobre angustia psicológica se han duplicado desde que comenzó la pandemia, las visitas a la sala de emergencias están aumentando para los jóvenes que buscan atención para la ansiedad, los trastornos del estado de ánimo y las autolesiones”.
Ese alto funcionario del gobierno dijo que el Departamento de Educación otorgará casi $300 millones para expandir los servicios de salud mental en las escuelas a través de dos concursos de subvenciones: “En los próximos días, se emitirán las reglas propuestas bajo el programa de subvenciones para servicios de salud mental en las escuelas”.
En segundo lugar, dijeron que el Departamento de Educación continuará trabajando con el Departamento de Salud y Servicios Humanos para emitir una guía sobre cómo los distritos pueden usar mejor Medicaid “para apoyar la prestación de servicios de salud mental a los estudiantes”.
Y tercero, añadió, el Departamento de Educación utilizará los programas de subvenciones existentes, incluido el programa de Escuelas Comunitarias y el programa del Centro de Aprendizaje Comunitario 21st Century para satisfacer mejor las necesidades de salud mental de los estudiantes.
Un tercer alto funcionario de la administración dijo que la Administración de Servicios de Salud Mental y Abuso de Sustancias y el HHS distribuirán casi $240 millones en total a dos organizaciones: la mayoría financiará Project AWARE, un programa escolar que ofrece recursos para niños con problemas de salud mental.
Otros $10 millones financiarán RECAST, que aborda el trauma y el estrés en la comunidad e identifica a los jóvenes en riesgo.
El presidente Biden lanzó su estrategia integral de salud mental en marzo pasado en el Estado de la Unión, pidiendo duplicar la cantidad de profesionales de salud mental en las escuelas, fortalecer el sistema de salud mental, conectar a más personas a la atención y crear entornos que prevengan y apoyen a las personas con desafíos de salud mental, incluso en línea.
En solo 18 meses, el gobierno de Biden ha invertido recursos sin precedentes en salud mental, a través del Plan de Rescate Estadounidense (más de $7,000 millones entre HHS y ED), el presupuesto del año fiscal 22 (más de $16,000 millones para salud mental y conductual) y la Ley Bipartidista de Comunidades Más Seguras ( $1.7 mil millones para salud mental).
Aun así, el presidente quiere invertir aún más (el presupuesto del año fiscal 23 incluye $27,000 millones en fondos discrecionales y $100,000 millones en fondos obligatorios durante 10 años para la salud mental)
