El Departamento de Estado advierte sobre riesgo extremo por detenciones arbitrarias, tortura y violencia generalizada en el país sudamericano
WHASHINGTON.- El gobierno de Estados Unidos emitió este 12 de mayo una actualización de su alerta de viaje para Venezuela, manteniéndola en nivel 4: “No viajar”, la categoría más alta de advertencia. La medida insta a todos los ciudadanos estadounidenses y residentes permanentes legales a abandonar el país de inmediato debido a un “peligro extremo para la seguridad personal”.
De acuerdo con el comunicado oficial del Departamento de Estado, los riesgos identificados incluyen:
- Detenciones arbitrarias por parte de las fuerzas de seguridad venezolanas, en algunos casos sin acceso legal ni contacto consular por periodos de hasta cinco años.
- Tortura y tratos crueles, según denuncias de exdetenidos y organizaciones de derechos humanos.
- Delincuencia violenta generalizada, como homicidios, robos a mano armada, secuestros y asaltos vehiculares.
- Aplicación arbitraria de leyes, que podría derivar en detenciones injustificadas.
- Disturbios civiles que pueden tornarse violentos sin previo aviso.
- Presencia de grupos terroristas en zonas fronterizas.
- Infraestructura sanitaria colapsada, con deficiente acceso a medicamentos y atención médica.
No hay asistencia consular
El Departamento de Estado recordó que la embajada de Estados Unidos en Caracas suspendió sus operaciones en marzo de 2019, por lo que no puede ofrecer servicios consulares ni ayuda de emergencia a ciudadanos estadounidenses en Venezuela.
Para quienes decidan permanecer o viajar al país pese a la alerta, se recomienda preparar un testamento, designar beneficiarios de seguros y otorgar poderes notariales a personas de confianza.
Tensión diplomática y contexto político
La alerta ocurre en un contexto de persistente tensión diplomática entre ambos países, tras la reciente liberación de cinco opositores venezolanos que se encontraban refugiados en la embajada de Argentina en Caracas. Además, Estados Unidos ha señalado con anterioridad al gobierno de Nicolás Maduro por violaciones sistemáticas a los derechos humanos y por impedir condiciones democráticas en el país.
