ESTADOS UNIDOS.- Más de 50 millones de personas en el sur de Estados Unidos sufrirán esta semana un calor agobiante. Se espera que la temperatura supere los 37,8 grados Celsius durante varios días. El índice de calor, que tiene en cuenta la temperatura del aire y la humedad y se conoce coloquialmente como la temperatura “que se siente”, podría dispararse por encima de los 51,6 grados Celsius.
A medida que suben las temperaturas, surgen los problemas de salud asociados al calor extremo, como el agotamiento por calor y el golpe de calor. ¿Quién es más vulnerable y qué medidas pueden tomar si se espera una ola de calor en su zona? ¿Hay precauciones específicas que deben tomar las personas mayores y las familias con niños pequeños? ¿Y cómo puede prepararse todo el mundo para los episodios de calor al aire libre?
Para responder a estas preguntas, hablé con la Dra. Leana Wen, analista médica de CNN. Wen es médica de urgencias y profesora de Política y Gestión Sanitaria en la Escuela de Salud Pública del Instituto Milken de la Universidad George Washington. Anteriormente, fue comisaria de salud de Baltimore, donde supervisó las respuestas de la ciudad al “Código Rojo” en caso de calor extremo.
Dra. Leana Wen: Las altas temperaturas que acompañan al calor extremo pueden tener muchos efectos graves y perjudiciales para la salud. Cuando la temperatura corporal de una persona aumenta como consecuencia de la exposición al calor extremo, puede sufrir un golpe de calor, que es una emergencia médica. Las personas con un golpe de calor tienen una temperatura corporal de poco más de 39 grados Celsius. Sus cuerpos dejan de ser capaces de enfriarse eficazmente y pueden sentirse confusos y mareados. Su ritmo cardíaco cambia y pueden desmayarse. Estas personas necesitan enfriamiento inmediato y atención médica de urgencia; de hecho, el golpe de calor puede ser mortal. Entre las enfermedades menos graves relacionadas con el calor se encuentran el agotamiento por calor, que puede evolucionar a golpe de calor, y los calambres por calor, que suelen asociarse al ejercicio en climas cálidos.
Además de los efectos directos sobre la salud, las altas temperaturas también pueden sobrecargar el corazón y los pulmones. La interacción del calor y las enfermedades cardiovasculares fue la causa directa o contribuyente de una de cada cuatro muertes relacionadas con el calor desde 1999, según datos de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos. Las altas temperaturas también están asociadas a la contaminación por partículas y ozono, que también tienen efectos negativos para la salud.
Wen: Los síntomas del agotamiento por calor incluyen dolor de cabeza, náuseas, mareos, debilidad, temperatura corporal elevada y disminución de la micción. El agotamiento por calor suele observarse en personas que trabajan o realizan actividades físicas durante periodos prolongados en ambientes calurosos. Si se sospecha que alguien ha sufrido agotamiento por calor, debe refrescarse y alejarse del sol y, de ser posible, llevarlo a un lugar fresco con aire acondicionado. Las compresas frías y las bebidas frías también ayudarán. Si la persona parece confusa, se desmaya o empeora, llame al 911 en Estados Unidos.
El golpe de calor es la urgencia médica a la que me refería antes. La atención médica inmediata es esencial, y los transeúntes no deben dudar en llamar al 911 cuando sospechen un golpe de calor.
Wen: Las personas más vulnerables son los ancianos y los muy jóvenes; las personas con afecciones médicas subyacentes importantes; y las personas con situaciones sociales que las hacen más propensas a experimentar los daños del clima extremo.
Las personas mayores tienen una menor capacidad de adaptación a los cambios de temperatura corporal y también corren un mayor riesgo de deshidratación. Lo mismo ocurre con los niños pequeños, que tienen menos reservas fisiológicas y pueden no ser capaces de informar de forma fiable cómo se sienten. Las personas con afecciones crónicas también son más susceptibles a la carga adicional que suponen las enfermedades relacionadas con el calor.
Estas personas vulnerables deben extremar las precauciones cuando hace calor. Limita el tiempo al aire libre cuando hace mucho calor. Por supuesto, hazlo si las autoridades locales han emitido un aviso de calor, pero incluso si no lo han hecho, conoce tus propios límites cuando el clima empiece a calentarse.
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Intenta trasladar las actividades físicas a espacios interiores o, si deben realizarse en el exterior, hazlas a primera hora en la mañana o por la noche. Si tienes que estar fuera durante el calor del día, intenta permanecer a la sombra. Asegúrate de utilizar protector solar y beber muchos líquidos. Si empiezas a desarrollar algún síntoma, como dolores de cabeza, mareos, calambres musculares, falta de energía o cansancio, aléjate del sol y entra inmediatamente en lugares frescos y con aire acondicionado.
El otro grupo muy vulnerable son las personas con circunstancias sociales específicas. Las personas sin hogar, por ejemplo, o las que viven sin aire acondicionado, corren un alto riesgo porque quizá no tengan la opción de buscar un refugio más fresco. Deben buscar recursos en sus gobiernos locales y estatales, que pueden proporcionar centros de enfriamiento y refugios temporales durante periodos de calor extremo. Las personas que trabajen al aire libre también deben extremar las precauciones en medida de lo posible, por ejemplo, manteniéndose bien hidratadas y procurando realizar las actividades que requieran un mayor esfuerzo durante las horas del día en que no haga tanto calor.
Wen: En primer lugar, reconocer que los niños pequeños a menudo carecen de la capacidad de informar de sus síntomas. Los niños también pueden emocionarse demasiado y querer jugar al aire libre, aunque se estén sobrecalentando. Y pueden olvidarse de beber líquidos. Sobre todo si viven en entornos en los que sus hijos no están acostumbrados al calor, hay que vigilarlos de cerca. Asegúrate de que beben mucha agua y considera la posibilidad de establecer un límite de tiempo de 15 a 20 minutos al aire libre con calor, momento en el que deben entrar y refrescarse.
En segundo lugar, no deje nunca a los niños ni a las mascotas en el auto. El interior de los automóviles se calienta con rapidez y, desgraciadamente, más de 38 niños mueren cada año en Estados Unidos en coches sobrecalentados. Incluso si vas a hacer un encargo breve, llévate a los niños contigo y no los dejes solos en un auto cerrado.
Wen: Además de tomar medidas para prevenir las enfermedades relacionadas con el calor, todo el mundo debería prepararse con antelación y tener planes de contingencia. Por ejemplo, si el aire acondicionado de tu casa deja de funcionar, ¿podrías ir a casa de un familiar o de un vecino? Además, ¿qué otras emergencias meteorológicas pueden producirse en tu zona y qué harás si, por ejemplo, hay un aviso de tornado? Por último, todo el mundo debería tener una “bolsa de viaje” con suministros de emergencia lista para usar. Asegúrate de comunicar estos planes a tu familia para que todos sepan qué hacer.
