Aunque la primavera suele asociarse con temperaturas más agradables que las del verano, en diversas regiones de México es común que los termómetros superen los 30°C. Por ello, el Director de Protección Civil, Antonio Riveroll, aconseja tomar precauciones para evitar golpes de calor.
“Es importante que la población se cuide, utilizando ropa cómoda y de colores claros. Además, es fundamental mantenerse bien hidratado. Si tienen la posibilidad de llevar una sombrilla al salir, sería ideal”, destacó Riveroll.
Las altas temperaturas pueden provocar golpes de calor, una condición que puede ser peligrosa para la salud. Los síntomas de un golpe de calor incluyen fiebre alta, piel caliente y seca, mareos, náuseas, confusión y, en casos graves, pérdida del conocimiento.
Por lo tanto, es esencial protegerse del sol usando ropa adecuada y aplicando protector solar. Si se presentan síntomas, se recomienda buscar atención médica de inmediato.
