El Gobierno de la Ciudad de México buscará que el aumento anual de las rentas no supere la inflación reportada por el Banco de México (Banxico), según una iniciativa de reformas presentada por el Jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, en conferencia de prensa.
CIUDAD DE MÉXICO.- El gobierno de la Ciudad de México busca enfrentar el encarecimiento de las rentas con una reforma que impone un límite de incremento según la inflación y limitar el aumento de rentas.
La propuesta que será enviada al Congreso local en los próximos días incluye modificaciones a la Ley de Vivienda y al Código Civil del Distrito Federal para enfrentar el encarecimiento de las rentas y así limitar el aumento en precio de rentas.
La iniciativa plantea que el incremento de las rentas esté estrictamente limitado al índice de inflación del año anterior, además, se plantea la creación de un registro digital de contratos de arrendamiento y la implementación de políticas públicas para la construcción de vivienda en arrendamiento asequible, orientadas a beneficiar a las clases populares.
Durante los últimos diez años, los precios de las rentas en la Ciudad de México han aumentado de manera excesiva, afectando a más de un millón de arrendatarios y generando problemas como especulación inmobiliaria, gentrificación y la expulsión de habitantes hacia las periferias. Batres destacó que este fenómeno afecta principalmente a las clases populares y medias.
La reforma propuesta incluye dos modificaciones, se añadirá una Fracción XVII al Artículo 1 de la Ley de Vivienda para garantizar la producción pública de vivienda en arrendamiento asequible para personas de menores ingresos. Asimismo, el Artículo 59 de la misma ley será reformado para fomentar políticas públicas que impulsen la construcción de vivienda en arrendamiento asequible por parte del gobierno de la Ciudad de México.
En segundo lugar, el Artículo 2448 D del Código Civil del Distrito Federal será modificado para limitar el aumento de rentas a un porcentaje que no supere el índice de inflación anual reportado por el Banco de México. Además, se establecerá un registro digital de contratos de arrendamiento para asegurar la transparencia y el control en la gestión de los arrendamientos. Este registro deberá ser realizado por el arrendador en un plazo no mayor a 30 días después de la celebración del contrato.
Batres destacó que la iniciativa está alineada con políticas de grandes ciudades globales como Nueva York, Berlín, París, Madrid y Singapur. El objetivo es mitigar el impacto social negativo del aumento de las rentas y consolidar a la Ciudad de México como una ciudad competitiva a nivel internacional, mientras se protege a los ciudadanos más vulnerables de los efectos adversos del encarecimiento de las rentas y limitar el aumento en precio de rentas.