BACALAR.- La Secretaría de Turismo (Sectur) y Comex en conjunto con la “Fundación Corazón Urbano A.C”., presentaron el proyecto Rutas Mágicas de Color en el Pueblo Mágico de Bacalar, que tiene el objetivo resaltar las tradiciones y la cultura de los Pueblos Mágicos, reforzando la promoción turística hacia un esquema que impulse el turismo responsable, sostenible y cultural, que a su vez contribuya a incrementar la derrama económica y construir comunidades cada vez más resilientes.
Esta iniciativa se llevó a cabo a través de intervenciones socio-artísticas en espacios públicos, que reflejan la diversidad de la cultura mexicana y el uso del color como un factor de transformación social, lo que resultó en la creación de murales y la pinta de fachadas con una extensión de más de 11 mil 600 metros cuadrados.
Durante la pinta de fachadas se llevaron a cabo talleres con la comunidad sobre la construcción de su realidad en el entorno, proyección de cine, cuentos colectivos, entre otros, con la finalidad de integrar a la comunidad y hacerlos partícipes de la identidad cultural de Bacalar.
Al respecto, Mai Hernández, directora del programa de impacto social Comex por un México Bien Hecho, declaró que “Rutas Mágicas de Color en Bacalar es la prueba tangible de la sinergia que encontramos en la Secretaría de Turismo y el municipio de Bacalar, para comenzar este proyecto con el cual nos proponemos resignificar el entorno comunitario y fomentar el trabajo participativo resaltando las historias de los Pueblos Mágicos, así como ser parte de la construcción de comunidades cada vez más sostenibles y resilientes, utilizando el color como un factor de transformación social que favorezca el fortalecimiento del tejido social, el sentido de pertenencia y la identidad de millones de mexicanos”.
Un estudio realizado por la consultora Riskop que evaluó proyectos de intervención que utilizan una metodología de integración comunitaria como la del programa Comex por un México Bien Hecho, concluyó que después la transformación del espacio las comunidades se convirtieron en corredores turísticos, incrementando en un 63% el número de visitas, 8 puntos más que donde no se desplegó este esfuerzo.