La Fiscalía y fuerzas federales detuvieron a dos personas y liberaron a menores traídos desde Chiapas bajo engaños; algunos tenían apenas 7 años.
CANCÚN.- Dieciséis menores originarios de Chiapas fueron rescatados la noche del lunes en la supermanzana 67 de Cancún, durante un operativo conjunto entre la Fiscalía General del Estado y fuerzas federales. Los niños, nueve niñas y siete niños, eran víctimas de explotación laboral infantil, obligados a trabajar largas jornadas vendiendo pozol en triciclos, en condiciones deplorables.

La gobernadora Mara Lezama dio a conocer el rescate durante su programa La Voz del Pueblo, donde agradeció a la ciudadanía por denunciar el delito. “Algunos de estos pequeñitos apenas tenían siete años; otros eran bebés que vivían con sus madres, trabajando más de 12 horas diarias a cambio de dos comidas y 100 pesos”, lamentó.
Los menores fueron traídos desde San Juan Cancuc, Chiapas, mediante engaños. Sus explotadores prometieron vivienda y empleo, pero una vez en Cancún los forzaron a vender bebidas bajo el sol, cargando termos de hasta 20 litros.

De acuerdo con las autoridades, los responsables operaban al menos 16 triciclos y obtenían ganancias estimadas en 32 mil pesos diarios, mientras las familias de los menores apenas recibían 100 pesos.

Por estos hechos, la Fiscalía Especializada en Protección de Niñas, Niños y Adolescentes abrió una carpeta de investigación. Dos personas fueron detenidas como presuntas responsables del delito de trata en su modalidad de explotación laboral infantil.