No hay un bateador mexicano que se encuentre más encendido en Grandes Ligas, que el jardinero de los Medias Rojas de Boston, Alex Verdugo, quien ayer volvió a ser factor determinante en el triunfo de su equipo junto con su compañero en la Selección Jarren Durán, quien remolcó tres carreras.
En la parte baja del primer rollo contra los Mellizos de Minnesota, Verdugo consiguió su segundo cuadrangular de la campaña al enviar la bola por detrás del bosque derecho.
Verdugo se ha convertido en uno de los bats más calientes que tiene en la actualidad la novena de Boston ya que en los más recientes siete encuentros acumula 10 hits y dos carreras impulsadas para un porcentaje de slugging de .560.
Antes de su festival ofensivo, Jarren Durán conectó una pelota contra el tobillo de Kenta Maeda, que provocó que el abridor de los Mellizos tuviera que dejar el juego. El jardinero central disparó un doblete remolcador de dos anotaciones en el fondo del tercer episodio.
Fue golpeado de lleno”, dijo el manager de los Mellizos, Rocco Baldelli sobre el pelotazo que recibió su abridor Kenta Maeda. “Realmente esperas no obtener un resultado malo, como un tobillo roto o algo así. Teníamos miedo, para ser honesto viéndolo en el suelo. Pero cuando se levantó y el dolor inicial desapareció, pudo ponerse de pie y moverse. Así que eso fue positivo”.
Los rayos X determinaron que el nipón no sufrió ninguna fractura.
Emilio Pagán se hizo cargo del trabajo en la loma y permitió cinco hits seguidos, incluido el doble de Durán, cuando Boston abrió una ventaja de 7-0. El tercera base Willi Castro conectó un jonrón por Minnesota y también sacó un out como lanzador en el octavo, retirando a Kiké Hernández con un roletazo en un lanzamiento por debajo de las 45 millas por hora.
Tanner Houck logró su tercera victoria de la campaña. Esparció cuatro hits en sus primeros seis innings, pero permitió un vuelacercas de dos carreras de Castro en el séptimo. También fue golpeado por una la línea de José Miranda en el pie izquierdo en el séptimo rollo, pero permaneció en el juego. En total, Houck permitió tres carreras, seis hits y una base por bolas, ponchando a siete en siete entradas, para consumar su apertura más larga en Grandes Ligas.