• 27/07/2024
  • Cancún, Quintana Roo, México

Niños migrantes pasan Navidad en calles de CDMX

Niños migrantes pasan Navidad en calles de CDMX

CIUDAD DE MÉXICO.- Decena de niños migrantes, en su mayoría haitianos, venezolanos, y centroamericanos, recibieron a Santa a la intemperie, dormidos dentro de casas de campaña hechizas, o incluso en el suelo, a cielo abierto, en las inmediaciones de la Plaza Giordano Bruno, ubicada en la colonia Juárez, de la alcaldía Cuauhtémoc de la Ciudad de México (CDMX), a donde regresaron cientos de ellos, una vez cerrado, el mes pasado, el albergue habilitado por el gobierno capitalino, en el Bosque de Tláhuac.

Sin embargo, las condiciones adversas y temperatura mínimas de hasta 3 grados, que se sintieron durante la madrugada del 24 de diciembre, para los menores migrantes, en el campamento que instalaron cerca de las instalaciones de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) esta Navidad fue una experiencia diferente, con regalos y alimentos calientes, que les fueron entregados por vecinos y empleados de la zona.

La pasamos bien, nos trajeron piñata, posada”, respondió a Excélsior Yamcelí, un niño de 12 años de edad, que entiende parte del español, y sirve de traductor a su mamá, Yoice, de 27 años de edad, con quien tiene siete meses en la Ciudad de México, esperando la entrega documentos de tránsito, por parte de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), para poder llegar a la frontera y alcanzar Estados Unidos.

Es feo (llevamos ) mucho tiempo”, responde Yamcelí, a la pregunta de cuánto tiempo tiene que salió de su casa, en Haití. Sin embargo, afirmó que esta Navidad “fue buena” porque recibió regalos, como una pelota y un balero, que no conocía, dijo.

Mientras, otros menores saltaban la cuerda o jugaban soccer, con los regalos que vecinos de la zona les llevaron el 24, en Noche Buena, además de organizar una posada, con piñata incluida.

Incluso este 25 de diciembre, hubo quien llevó chocolate caliente y comida de la temporada, “para que los migrantes tuvieran un poco de abrigo”, como afirmó a Excélsior, Martha “N”, vecina de San Ángel, en Álvaro Obregón, y empleada de una empresa ubicada en la Colonia Juárez, cerca de Plaza Giordano.

Yo vivo por San Ángel y trabajo al lado de la Casa del Migrante, y hoy al ser un día especial, les trajimos por lo menos un chocolatito caliente, sándwiches, pollo, para que por lo menos se calienten un poquito estos días” refirió la mujer, mientras repartían la bebida caliente a decenas de migrantes formados en fila, la mayoría de ellos, menores de edad, que recibieron el detalle con una sonrisa en el rostro.

Está muy rico. Y me gustó la Navidad, aquí nos regalaron muchas cosas, muñecas, juguetes. Y nos dieron un chocolate o algo”, dijo a este diario Bianca, una menor de 8 años de edad, que viaja acompañada de su mamá. Tienen más de cinco meses esperando documentos migratorios.

Gracias a Dios la pasamos bien desde que amanecimos muchas ayudas, colaboraciones, comida, ropa, nos han traído. De verdad los mexicanos se han portado muy bien con nosotros. Cada rato viene hoy (25 de diciembre) siguen colaborándonos y bueno muy agradecidos, nos han hecho sentir que estamos en casa, no nos han denigrado”, señaló por su parte, Rocío Guevara, proveniente de Venezuela.

La mujer viaja con su esposo y su hijo de ocho años. Tienen cinco días en la ciudad y su esposo ya encontró trabajo como guardia de seguridad, a pesar de que no cuenta con papeles, pero dijo, es necesario “sacar unos pesos para sobrevivir”. Señaló que por la inclemencia del tiempo, muchos menores de edad, presentan fiebre o gripe.

Son al menos 500 migrantes los que retornaron a inicios de diciembre a la Plaza Giordano Bruno, entre haitianos, hondureños, nicaragüenses y venezolanos, para vivir en pequeñas casas de campaña, que ha revestido con plásticos, papel o periódicos, para enfrentar las inclemencias del clima invernal de la Ciudad de México, en espera de obtener documentos migratorios. Muchos de ellos tienen más de siete meses en la ciudad.

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