CANCÚN.- Luego que Wendy Moreno denunciara ante la Fiscalía General del Estado al colegio “Benjamin Franklin” por presuntamente ocultar el accidente de su hija, a quien le cayó una portería el pasado martes, los padres de otros cinco niños aseguran que sus hijos también fueron lesionados en ese incidente.
Aunado a ello, hoy martes, peritos de la Fiscalía de Quintana Roo acudieron a esta escuela, ubicada en la avenida Fonatur, a recabar evidencias.
En entrevista, la madre de familia dio a conocer que ayer acudió ante la autoridad para interponer una demanda formal contra dicha escuela, por negligencia y lesiones en agravio de su hija, quien tras permanecer internada cuatro días en el hospital privado Azura, finalmente ya fue dada de alta, aunque deberá ser sometida a un tratamiento de dos meses para lograr su recuperación total.
La mujer recordó que todo inició cuando personal de la escuela se contactó con ella para pedirle que acudiera por su hija, ya que había sufrido “una caída” y estaba inconsciente, ocultando lo que verdaderamente había ocurrido.
La agraviada indicó que fue su marido quien descubrió que se había tratado de un accidente con la portería de la escuela, la cual presuntamente habría caído sobre varios estudiantes.
La señora Moreno señaló que lo único que busca es que la escuela se haga responsable de los gastos generados, pues durante los días que su hija estuvo hospitalizada nunca recibieron la visita de los representantes del colegio.
“La escuela en vez de dar la cara, como se debe de dar, porque ellos son los responsables, la escuela lo que está haciendo es seguir con sus mentiras, decían que supuestamente no se había caído eso y en el papel que nos dieron ayer del seguro ahí dice que se cayó la portería”, aseveró.
También reveló que en los últimos días ha recibido llamadas de padres de familia indicándole que sus hijos están presentando secuelas derivado de lo sucedido, aunque difícilmente podrán actuar penalmente, dado que el día de los hechos aceptaron llevarse a los menores, creyendo las supuestas mentiras por parte de la escuela.
“Hasta ahorita ya son como cinco niños, a una niñita que tiene problemas de su caderita me estaba diciendo su mamá, otra tiene el problema de la espalda, un niñito de un brazo y otro de una piernita y el otro creo que nada más es un dolor de cabeza”, detalló.
Por último, pidió justicia en su caso y comentó que tanto ella como el resto de los tutores han decidido que darán de baja a sus hijos para inscribirlos a otra escuela.
