NUEVO LEÓN.- Al concluir una rueda de prensa donde se actualizó la cifra de lesionados, Erik Cavazos, titular de la corporación, fue contundente al expresar que las ráfagas de viento que llegaron de “sorpresa” al estado, ocasionaron el desplome del templete.
Y aunque trascendió que hubo una advertencia de ráfagas de viento para el estado por parte de la Conagua, Cavazos indicó que el pronóstico no fue preciso.
“Específicamente en ese lugar no (…) El estado de Nuevo León tiene 51 municipios, específicamente en la zona en la que estábamos, donde se estaba instalando al momento, no se tenía previsto esas ráfagas”.
“Al momento de la instalación, las condiciones meteorológicas eran las adecuadas para llevarse a cabo el evento”, dijo.
Insistió que se trató de un evento atípico.
“Hay que recordar, estamos en cambio climático, las condiciones están cambiando”, aseveró.
No aceptó, ni se deslindó de la responsabilidad.
“Las condiciones, y ustedes lo podrán constatar con la gente que estuvo ahí, estuvieron cambiantes de 5 a 10 minutos, condiciones de fuertes vientos”.
¿Se deslindan?
“Nada más quiero dejarles bien en claro, vientos de 80 a 100 kilómetros por hora, fueron cambiantes, son muy rápido el tiempo, la Fiscalía tendrá que determinar la cuestión final”, puntualizó.
