Imagina que un día, a final de mes, ves el ingreso de tu nómina en el banco y la cantidad es superior a lo que te corresponde. Imagina que la suma es, de hecho, muchísimo más alta de lo que te pagan habitualmente por un mes de trabajo. Imagina que tu sueldo se ha multiplicado 330 veces.
Esto es lo que le ocurrió a un ciudadano chileno trabajaba en el Consorcio Industrial de Alimentos (Cial) hace unos días.
En total, recibió 165.398.851 pesos chilenos, unos 170.507 euros al cambio. Mientras que su sueldo como asistente de despacho era de 500.000 pesos (515 euros).
¿Y qué hizo? Primero, optó por la prudencia. Según informa el medio local Diario Financiero avisó a un superior para explicarle que debía haber un error en el pago de su nómina.
Por supuesto, la empresa le contestó que debía devolver la cantidad extra ingresada.
El empleado se comprometió en ese momento a ir a su banco al día siguiente y reembolsarlo.
DELITO DE APROPIACIÓN INDEBIDA
Pero se lo pensó mejor y no lo hizo. Desde temprano, la empresa, desconfiada de que fuera a devolver el dinero, comenzó a llamarle y mandarle mensajes de WhatsApp. A las 11 él contestó que se había dormido e iría más tarde, pero era ya una burda mentira.
No volvieron a saber de él hasta el 2 de junio, cuando recibieron una notificación de un bufete de abogados que les comunicaba que el empleado renunciaba a su trabajo.
Desde entonces, no se sabe nada más de su paradero.
Por su parte, la empresa ha emprendido acciones legales contra él por un supuesto delito de apropiación indebida.
“Se le informó y aclaró que ese dinero no correspondía al pago de ningún servicio”, se expone en la acción judicial.
