Por: Maribel Torres Martín
La zona hotelera de Cancún es sin duda uno de los lugares más visitados, por su acceso a las playas, restaurantes, hoteles, discotecas y demás servicios y distracciones que ofrece a millones de turistas cada año, es por ello que principalmente los fines de semana y vacaciones se vuelve muy complicado por la cantidad de vehículos que transitan por su boulevard.
Desde hace ya varios años en gobiernos pasados se ha planteado un proyecto de un nuevo acceso que atraviese la laguna Nichupté para desahogar el cuello de botella que se genera en la zona hotelera, el cual nunca tuvo éxito por falta de recursos que se requieren para la obra, hasta ahora que, a tan solo un año de su mandato, la gobernadora Mara Lezama gestionó y logró que se designe la inversión requerida.
El Puente Nichupté es una gran obra, no solo por lo que representa en inversión y construcción, sino porque va a resolver un añejo problema de acceso y vialidad que cada día se agudiza más por el crecimiento turístico que genera miles de empleos para ciudadanos cancunenses quienes a diario transitan por esa zona.
El Puente tendrá una longitud de 8.8 kilómetros y será una realidad en 2024, expresó la gobernadora Mara Lezama al recorrer los avances que registra su construcción que transformará la imagen urbana de Cancún.
Esta obra saldrá en la intersección del bulevar Colosio con la avenida Kabah para llegar prácticamente al kilómetro 15 a la altura de la plaza Kukulcán. Actualmente se trabaja en el lado de la zona hotelera, justamente donde llegará el puente.
Las obras que en los últimos meses se han consolidado como la tan anhelada rehabilitación del Boulevard Colosio y el Distribuidor vial del Aeropuerto, son muestra del compromiso y trabajo de la gobernadora.
Cancún poco a poco va teniendo una nueva cara, una cara de desarrollo, modernidad, pero mejor aún, una cara de prosperidad para sus habitantes.
Nos leemos en la siguiente columna.
Twitter: @emaribel_torres
